11.23.2006

Algunas parabolas



Las parabolas populares siempre dan una enseñanza que nos pueden servir en algun momento de la vida

Aprender a amar



A fines de siglo, un niño fue encontrado en los bosques de una pequeña aldea de Francia. Sus padres lo habían dado por - muerto. Por algún milagro no murió en el bosque. Sobrevivió, no como un niño aunque f1ísicamente era un ser humano, sino como un animal. Caminaba en cuatro patas, tenía por casa un hoyo en la tierra, no poseía un lenguaje significativo, salvo un grito animal, no reconocía relaciones cercanas y no se preocupaba por nada ni por nadie, salvo su supervivencia. (Leo Buscaglia)
Si la persona se cría como un animal, se comportará como un animal, si, por el contrario, crece en un ambiente humano donde es mimado, es tenido en cuenta, aprenderá a amar y vivirá en el amor.



Al más grande de todos
Autor:


No se puede visitar París sin ir a ver la torre Eiffel, toda ella de acero, que construyó el famoso
ingeniero Alejandro Gustavo Eiffel, de 1887 a 1889.
Después de inaugurada la torre, llegó a París Tomás Alba Edison, el más célebres de los inventores
norteamericanos, con 1,300 patentes. Subió a la famosa torre, y se le invitó a escribir unas
palabras en el libro de oro de los visitantes.
Edison escribió: “Al señor Eiffel, el valiente constructor de esta obra tan gigantesca y original de
la moderna ingeniería, de un hombre que siente la más grande admiración por todos los ingenieros,
incluido el más grande ellos: Dios”. Tomás Alba Edison.

1 comentario:

Carlos Alberto Cardona dijo...

Felicidades por tu blog, yo pienso que las parabolas...
Padre Carlos